Lunes 16/09/2013 por pedrola
Leica C: la Lumix LF1 con traje de etiqueta. Estamos acostumbrados a asociar la marca Leica con cámaras fotográficas de corte y formas clásicas, en las que se cuida al mismo nivel los aspectos relacionados con el diseño y la apariencia como los técnicos. Eso es lo que nos ofrece esta recién estrenada Leica C, que se podrá comprar en el mercado internacional a finales de este mes de septiembre o comienzos de octubre. Una cámara pensada para grandes aficionados, para ese tipo de compradores que entienden que un equipo de estas características es algo más que un aparato con el que tomar fotografías, sino una pieza con la que dejar claro nuestro gusto por el estilo.
Tal y como ha sucedido ya anteriormente en otros equipos de Leica, para el desarrollo de sus propuestas, la marca alemana busca ofrecer lo mejor del mercado, apoyándose en cámaras ya contrastadas y con cierto recorrido. Eso es lo que sucede con esta Leica C, que se ha construido a partir de la conocida Panasonic Lumix LF1, razón por la que nos encontramos con dos equipos prácticamente idénticos a nivel técnico, igualdad que no se mantiene en cuanto a la estética.
Característica de la Leica C
Al igual que en la Panasonic Lumix LF1, el sensor con el que nos encontramos en esta Leica C es uno de 1,7″ de 12,8 megapíxeles, acompañado de un objetivo Leica DC-Vario Summicron de cuatro aumentos estabilizado, con flash integrado. Todas las funciones se controlan desde la pantalla de 3 pulgadas, con 921 mil píxeles de resolución, pudiendo operar con ella en los habituales cuatro modos P/A/S/M, que van desde el completamente manual al automático.
Con la Leica C podemos tomar fotografías tanto en formato JPG como en RAM, añadiendo las opciones de conectividad a través de WiFi y NFC, algo en lo supera las prestaciones de la Panasonic Lumix LF1, que no cuenta con esas opciones. Por medio de esas conexiones y la aplicación Leica C Image Shuttle podemos tomar el control remoto de la cámara desde un smartphone u otro dispositivo inalámbrico (un ordenador o una tablet).
Con traje de etiqueta en oro y negro
De todos modos, aunque las prestaciones de esta Leica C están a la altura de lo esperado en una cámara fotográfica de este nivel, no es eso lo más destacado de este equipo. Si por algo llama especialmente la atención es por su diseño compacto de líneas muy clásicas, en colores oro y negro que le dan una apariencia sobria y elegante, como si hubiera sido vestida para una gran gala. Un detalle con el que espera convencer a más de un gran apasionado a la fotografía, el verdadero público objetivo de esta cámara, tal y como lo eran ya en la Leica D-Lux 6.
Todos aquellos que se queden prendados de la apariencia de esta Leica C, y estén dispuestos a hacer el desembolso que su diseño conlleva, podrán llevársela a casa a un precio de unos 650 euros, con el que se pondrá a la venta en el mercado internacional. Un mercado internacional en el que se estrenará en el Reino Unido, que será el primer país en recibirla en sus tiendas.