Miércoles 18/07/2012 por Alejandro Nieto Alonso
iPhone 5: tendrá una pantalla más delgada. El nuevo smartphone de Apple no solo aumentará de tamaño su pantalla, de 3,5 a 4 pulgadas, también intentará reducir su espesor gracias a una nueva tecnología que permitiría ganar espacio para otros componentes esenciales como por ejemplo la batería. Apple fundamenta este importante cambio añadiendo los sensores táctiles al panel LCD, una integración con la que se reducirá aún más el grosor del móvil. Un proceso que le convertiría en uno de los smartphones más delgados del mundo.
Algunos analistas apuntan a que el próximo iPhone 5 será el smartphone más vendido de la historia. Ni siquiera ha sido presentado y sigue generando multitud de informaciones, rumores y noticias a su alrededor. La rivalidad con los Samsung Galaxy ha convertido a este nuevo modelo de Apple en uno de los smartphones más esperados en mucho tiempo, generando una expectación abrumadora. Veremos si al final está a la altura de todas estas exigencias. Ya ha empezado a fabricarse y podría ser presentado en septiembre, incluso en agosto como apuntan algunos.
El último rumor que nos llega es que la quinta generación del teléfono móvil de Apple llevará una pantalla mucho más delgada que sus predecesores, lo que le permitiría ganar espacio para otros componentes como la batería y además tener un diseño incluso más fino.
Ya os hemos hablado del aumento de tamaño de la pantalla, de 3,5 a 4 pulgadas, continuando así la moda de la mayor parte de los smartphones. Sin embargo, este nuevo proceso de fabricación permitiría eliminar alguna capa que reducirá el espesor final de esta pantalla y, posiblemente, del móvil en general.
Esta delgadez se conseguiría añadiendo los sensores táctiles al propio LCD lo que evita tener que instalar otra capa más con esos sensores. De este modo, la pantalla del iPhone 5 sería mucho más delgada.
Aunque este cambio no parece gran cosa las consecuencias son enormes y benefician mucho al smartphone. De momento, este ajuste permitiría que las imágenes ganarán en nitidez con lo que la pantalla aumentará su calidad de visión. La segunda consecuencia es que una pantalla más fina permitirá que el smartphone sea más delgado y, a la vez, deje más espacio para otros componentes como puede ser la batería. Se rumorea que esto es lo que ha decidido Apple, instalar una batería más grande que dotará al smartphone de mayor autonomía, uno de los grandes problemas de los teléfonos móviles inteligentes actuales.
Esta información prodece del periódico estadounidense The Wall Street Journal. Las mismas fuentes apuntan a una reducción de costes de fabricación para Apple gracias a este nuevo sistema de pantalla, ya que no tendrá que comprar por separado pantallas táctiles y LCD. Será solo un proveedor el que fabrique este nuevo sistema de pantalla, lo que ayudará a la compañía americana a reducir costes. Las firmas que actualmente fabrican pantallas para el iPhone son Sharp, Japan Display y LG.
Este uso de la tecnología in-cell por parte de Apple en sus pantallas permitirá que el sensor táctil y el panel LCD estén integrados, eliminando la capa del sensor de medio milímetro, un cambio que puede convertir al iPhone 5 en uno de los smartphones más delgados del mundo. Veremos qué aporta esta tecnología al teléfono móvil más esperado de los últimos tiempos. ¿Qué te parece este posible cambio y sus consecuencias para el diseño general del iPhone 5?