Según The Korean Times, las demandas de Samsung se fundamentan en el supuesto uso sin autorización por parte de Apple de ciertos sistemas de conexión inalámbrica que son propiedad de la surcoreana.

Esta maniobra es un claro contraataque de Samsung al veto que ya sufrió esta por demandas de Apple en países como Alemania, donde no puede comercializar la gama Galaxy: ni el smartphone Galaxy SII, ni la tablet Galaxy Tab, e incluso vetos en sus últimos productos presentados en la feria IFA 2011. Pero además, la empresa californiana de la manzana pretende repetirlo con otra demanda que ha interpuesto en Australia.

Sin embargo, parece que ahora Apple está siendo atacada con su misma medicina y se le acumulan los enemigos por todos los flancos (Google, HTC, Nokia…). Cuando aún no se conocen las especificaciones concretas, ni la fecha exacta del lanzamiento del iPhone5, estos litigios podrían hacer mucho daño a Apple, pues un retraso en el lanzamiento de su nuevo smartphone en Europa le harían perder muchas ventas; dando a su vez más tiempo a Samsung a tener listo su Galaxy S3, previsto para 2012.