Jueves 19/01/2012 por I.Caamaño
Pepe: Twitter se une contra la actuación del jugador. Ayer fue el esperado primer clásico del año y todos sabíamos que Twitter sería un hervidero de comentarios relacionados con el partido, tanto antes, como durante, y después. Y lo fue, es cierto, no faltaron los trending topics Madrid-Barça, gol de Puyol o 90 min. Pero lo más llamativo de ayer es que todos ellos quedaron eclipsados por otros hashtags y todos relacionados con lo mismo, un suceso nada agradable y que no hace ningún bien al fútbol. Nos referimos a la actuación de Pepe, que los usuarios denunciaron desde Twitter al coro de Lo de Pepe o #pepeveteya.
Siempre que hay un partido como el de ayer, sabemos que Twitter será la plataforma principal para opinar, criticar y en definitiva, dar a conocer qué piensan unos y otros sobre el resultado del encuentro o la calidad del arbitraje. Hasta aquí todo normal.
Pero el encuentro de ayer dejo a muchos un mal sabor de poco y no por el resultado, sino por la actuación de varios jugadores, especialmente de Pepe. Como ya sabrá la mayoría, el jugador fue captado por las cámaras pisando la mano de Messi. Además, fingió una agresión en la cara por parte de Cesc Fàbregas. En ambos casos, las reacciones de rechazo del público no tardaron en aparecer.
Apenas segundos después de tener lugar el pisotón, comenzaban a aparecer en la red social numerosos comentarios denunciando lo que había hecho el jugador y la tensión era más que palpable, aunque en la opinión había bastante consenso. Se trataba de un acto innecesario, que debía ser sancionado y que hacía un flaco favor al deporte.
Poco tardaron los usuarios en conseguir que Lo de Pepe fuera trending topic, pero era solo el comienzo. Le siguieron otros como #pepevete ya, algunos más fuertes como #pepeasesino y otros, de índole crítica pero jocosa, como #peliculasconpepe. El final de la noche llegó de la mano de la crítica, el rechazo, la ironía y el Pisando Fuerte. Pero debajo de todo ello subyace una conclusión: la decepción de muchos ante un acto que no hace ningún bien al fútbol y el deseo de que se tomen medidas.