Viernes 20/01/2012 por I.Caamaño
Megaupload: FBI lo cierra y Twitter y Anonymous responden. De nuevo hoy nos toca empezar el día analizando la noticia que revolucionó la red anoche y que se coló entre los trending topics como forma de protesta de los internautas. Estamos hablando del cierre de Megaupload, una noticia que nos pilló de sorpresa a muchos, pero que no deja de resultar una coincidencia “muy oportuna” en medio del debate que se desarrolla en torno a la aplicación de la ley SOPA. Apenas unos días despúes del apagón colectivo que muchas webs pusieron en marcha como forma de protesta, ayer nos llegó la noticia de que el FBI había cerrado Megaupload.
Finalizaba la tarde y en Twitter la gente publicaba comentarios jocosos al son del hashtag #frasesdecarpeta. Fue entonces cuando se filtró una información que no tardaría en extenderse como la pólvora. Se trataba del anuncio de que Megaupload había sido cerrado por el FBI y que se en el curso de la operación se habían producido varias detenciones.
Poco tardó la noticia en extenderse gracias a Twitter y muchos nos volcamos en la búsqueda de información para conocer qué estaba pasando. Fue así como encontramos la nota de prensa sobre la operación, a la que os recomiendo que dediquéis unos minutos si os es posible.
La reacción de los internautas ante la noticia es fácilmente imaginable. En cuestión de minutos Megaupload se había convertido en TT y le siguieron Fileserve, P2Py eMule. También lo hizo Napster, de la mano de los usuarios que se preguntaban porqué se cerraba Megaupload justo ahora y tras haber existido tanto tiempo, viendo lo rápido que se cerró Napster.
Pero las consecuencias del cierre de Megaupload no acabaron ahí, y poco después algunos empezaron a barajar la posibilidad de que redes como Facebook o Twitter también desaparezcan, lo que dio lugar al TT #SiCierran Twitter.
Pero la consecuencia más importante no fue ésta, sino la que llegó de la mano de Anomymous. Y es que el colectivo puso en marcha la #OPMegaupload, que consistió en el ataque a la web del Departamento de Justicia estadounidense y a varias empresas musicales, entre las que destaca Universal Music. Y esto, parece ser, es solo el principio.