Las horas previas al debate estuvieron marcadas por el tema #ReiniciaElDebate, que llegó a ser TT mundial, y en el que se criticaba el formato bipartidista del #CaraACara, sin dar opción al resto de partidos, y con alusiones a las reivindicaciones sobre el 15-M que no fueron tratadas por ninguno de los candidatos.

#ElDebate volvió a concentrar a multitud de tuiteros que comentaron segundo a segundo los aspectos más relevantes y curiosos del enfrentamiento: el coste del mismo (500.000 euros), el desencanto por la falta de propuestas claras, las habilidades lectoras de Rajoy, su deslices con #Cazalla o el “Rodríguez Rubalcaba”… y hasta sobre el propio moderador que aglutinó los tuits más divertidos bajo el hashtag #campovidalfacts.

Al termino del mismo, #RajoyGana, creado desde el propio Partido Popular, se fue extendiendo hasta convertirse también en TT mundial, gracias al apoyo incluso de Esperanza Aguirre.

Aunque este debate de 2011 ha tenido mucha audiencia, no ha logrado superar los 13 millones de espectadores que consiguiera en 2008 el debate Zapatero-Rajoy. Una de las razones, puede apuntarse a un menor interés en la vacua pugna política con la que está cayendo, pero lo que es claro es que por primera vez se ha podido seguir la emisión en directo desde las webs de las cadenas de televisión, además de la emisión a través del canal especialmente dedicado a las elecciones en YouTube.

Lo curioso de todo es que en diversas encuestas publicadas nada más terminar la emisión, tanto en televisiones, como el día después en los principales diarios, dan una ajustada victoria en el debate a Rajoy frente a Rubalcaba, pero si observamos el sondeo del propio YouTube en la web donde lo emitió, Rubalcaba duplica con un 66% a Rajoy. ¿El público de televisión y el de Internet son tan diferentes?, ¿o es que algunos medios cocinan sus datos más que otros?