Martes 19/04/2011 por A. Hurtado
Philips no fabricará más televisores. la marca holandesa de electrónica de consumo, ha decidido dejar de fabricar televisores. Ha visto como luchar contra los fabricantes asiáticos es una partida perdida a la larga. Con una línea de investigación en constante actualización, no da tiempo a que la tecnología se amortice, ha llegado un momento que con los avances que estamos viviendo en el mundo de las pantallas, en el mismo momento de presentar una nueva, ésta ya se había quedado obsoleta. Todo esto ha llevado a los fabricantes asiáticos (con un margen de beneficio mayor) a reducir drásticamente los precios de sus televisores para deshacerse del stock. Cosa que se ha cargado literalmente el mercado.
A parte de ello, otras son las ventajas que favorecen al mercado asiático, para empezar la mano de obra que es increíblemente más barata. Después, el nivel de industrialización de las fábricas, que permiten utilizar menos mano de obra y una fabricación de alto rendimiento. Como tercer factor, el precio de la energía y los combustibles que resulta especialmente barato en los países asiáticos debido a sus políticas medioambientales “excesivamente permisivas”, y finalmente las ventajas comerciales que han ido adquiriendo a lo largo de los años (reducción de impuestos en destino).
Con unas normas absolutamente desiguales era evidente que así no se podía sostener la producción. Hace un par de años, Philips empezó a montar paneles LG en sus televisores, porque sencillamente le salía mas barato comprarlos y montarlos que fabricarlos. Pero el año pasado ni ese negocio le resultó rentable.
Con esto una de las marcas que primero fabricaron aparatos de televisión (comenzó en 1950 con modelos en Blanco y Negro) parece decirnos adiós, al menos en este campo.
Philips migrará y potenciará su actividad a los aparatos de la industria médica (dónde comenzó hace 10 años y está consiguiendo buenos resultados), pequeños electrodomésticos y sistemas de iluminación.