Whatsapp: ¿Comenzarán a pagar los usuarios de Android? Pues todo indica que así será, porque un gran número de usuarios de Android ya están recibiendo los mensajes de aviso de caducidad de su licencia gratuita, con lo que tendrán que pasar por caja para poder actualizar la aplicación y seguir utilizando el servicio de mensajería instantánea más popular del mundo. Una decisión de la que, a pesar del reducido coste de la aplicación, pueden derivarse consecuencias importantes para la posición de Whatsapp en el mercado, ya que perder la etiqueta de ‘gratis’ es siempre un movimiento que implica importantes riesgos a la hora de llegar al gran público.

Lo cierto es que se ha armado un gran revuelo en foros y puntos de encuentro de usuarios de Android a raíz de esos mensajes de aviso de caducidad de la aplicación, ya que, de entrada, ha habido mucha desconfianza con el origen de los mismos. De todos modos, está claro que proceden de los desarrolladores de la aplicación que, en realidad, lo único que han hecho es equipararlos con los propietarios de un iPhone 5 (que ya se puede vestir con fundas Lego), ya que la descarga de Whatsapp ya tenía un coste para las versiones iOS.

Un año de licencia gratuita

Lo que sí supone esta decisión es un cambio importante con respecto a la situación a la que se habían acostumbrado los usuarios de Whatsapp. Hasta ahora, al descargar la aplicación conseguías un año de licencia gratuita, una licencia que se renovaba también de forma gratuita. Sin embargo, ahora, esa renovación conllevará un coste, uno muy reducido (0.89 euros), pero un coste al fin y al cabo, con lo que la noticia ha corrido como la pólvora por todos los rincones de la red, dejando atrás todos los rumores para convertirse en realidad.

Tal y como está la situación, todos los usuarios de Android, desde los propietarios de terminales de gama alta como el Samsung Galaxy S III a los que tengan otros de gama baja, tendrán que pagar por conseguir su aplicación, con lo que al finalizar este mes de marzo todos los usuarios de Android estarán obligados a realizar el pago si no quieren perder el uso de la aplicación. Una decisión que va a conllevar, seguramente, tanto una buena cantidad de ingresos para los desarrolladores, como un buen número de bajas entre los usuarios de la aplicación.

¿Es mucho o poco?

La verdad es que, analizándolo fríamente, el pago de 0.89 euros por una aplicación que puedes utilizar durante todo un año, con el fuerte ahorro que te ofrece en el número de llamadas y mensajes realizados, no parece ser demasiado. De hecho, podríamos decir todo lo contrario, que sigue siendo un chollo para todos los usuarios de un smartphone, porque en apenas tres llamadas ya se recupera el coste de la aplicación.

Sin embargo, el hecho de pasar de ser gratis a tener coste es un cambio muy importante dentro de la percepción del usuario, con lo que es complicado vaticinar las consecuencias que puede tener a medio y largo plazo. Por ahora, es evidente que el hecho de que haya tantos usuarios de la aplicación es un reclamo para los que tengan que actualizar, pero también hay que tener en cuenta que hay otras aplicaciones semejantes, que siguen siendo gratuitas (al menos por el momento), que los propios usuarios podrían hacer crecer hasta convertirlas en las nuevas Whatsapp.