Martes 24/01/2012 por Javier Rodrigo
SOPA: se queda sin el apoyo de la industria de los videojuegos. La Entertainment Software Association (ESA), organización que representa los intereses de las grandes empresas del mundo de los videojuegos en los Estados Unidos, ha retirado oficialmente su apoyo a la polémicas ley SOPA (Stop Online Piracy Act) y a PIPA (aProtect IP Act), debido a las presiones que ha recibido las últimas semanas de las empresas tecnológicas. Esto sorprende más todavía al saber que a principio de este mes la ESA hizo un comunicado advirtiendo que seguiría dando todo su apoyo a pesar de los malestares que pudiera producir a los usuarios.
Tras todo lo ocurrido estas semanas a causa de la ley SOPA y, sobretodo, sus posteriores represalias, es interesante recordar que la industria de los videojuegos factura más que el cine y la industria musical y por eso es muy significativo que la ESA haya lanzado un comunicado en el que reclama a las autoridades que centren todas sus energías y que igualen eficazmente los intereses creativos y tecnológicos. Como industria de innovadores y creadores, están al tanto de la importancia de la protección de contenidos como de la innovación tecnológica, y se comprometen a trabajar para promover una solución equilibrada, pero creen que ni la ley SOPA ni la PIPA son la solución.
¿Cómo afectarían estas leyes a la industria del videojuego?
Nintendo, al conocer la gravedad del asunto, retiró inmediatamente su apoyo a la ley SOPA, al igual que Sony y Electronic Arts. Empresas desarrolladores de videojuegos como Bungie han mostrado desde un comienzo su total rechazo a una ley que les cortaría las alas en el intento de socializar los videojuegos.